Eres más que un motivo...

Levanto mi voz para adorarte mientras me postro a tus pies,

quiero humillarme a lo sumo y decirte que te amo

que nada podría hacer aunque quisiera,

¿Como podría agradecerte?

Tu amor es inigualable,

es hermoso...

Por eso eres el motivo

y cuando recuerdo la cruz y veo tu dolor

en lo único que pienso es...

Que nací para adorarte!

Cristo, quiro seguirte hasta el final...

El mundo es mi espejo retrovisor...

Atrás quedo el morral de los anhelos y los sueños;

las ansias de triunfar y los amores de niña,

deje mi éxito y mi fracaso,

lo que le daba sentido a una vida vacía...

Me cautivo tu voz, tu autoridad,

cada una de tus palabras me infunden aliento

y me llena la idea de saberme rescatada por ti...

Me deje llevar por tus promesas,

amo tu ley y tu voluntad...

Quiero andar el Camino, fluir hacia la libertad

sentirme viva!

y un día, encontrarme en ti con el Padre

en la magnificencia de tu Reino...